Peligros de las "pelis" de chicas

Magnolias de Acero

Actores: Sally field, Julia Roberts, Daryl Hannak, Dolly Parton, Shirley Maclaine, Olimpya Ducakis

Descripción de la película: en esta historia de mujeres sureñas, reunidas en torno a un boda y a la tragedia a la que esta dará paso poco después, los hombre aparecen sólo a título ornamental; de hecho, en la obra teatral de Robert Harling, que él mismo adaptó para el cine, los hombres nunca aparecían sobre el escenario, eran sólo una referencia en las frecuentemente demoledoras conversaciones del femenino sexteto protagonista. 

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Acabo de escuchar la vídeo conferencia de TED, Jill Bolte Taylor: El derrame de iluminación, y si me he decidido a insertarlo es, sobre todo, por la descripción inicial que hace sobre el funcionamiento de los dos hemisferios que es muy didáctica ya que voy a aprovechar su argumentación para profundizar en el tema de los hemisferios…

Recomiendo visionar el vídeo que inserto al final antes de seguir leyendo...

No cabe la menor duda de que es un testimonio con una carga emocional impresionante (la persona pudo morir y ha necesitado largos años para recuperarse) pero, particularmente, lo que más me ha vibrado son los comentarios que hace desde su hemisferio izquierdo (o analítico) antes de percatarse de que estaba sufriendo una hemorragia cerebral… Además son los que me han provocado risas, al igual que a su auditorio, por el desdoblamiento aparente de su personalidad. 


El cerebro humano está divido en dos hemisferios: el izquierdo o «masculino» que gobierna el lado derecho del cuerpo y el derecho o «femenino» que gobierna el lado izquierdo. Es triste que esta persona del género femenino haya tenido que sufrir una experiencia tan traumática para que su lado masculino, (o yo analítico) tomara conciencia de su lado femenino, algo que las «chicas tradicionales» han experimentado de primera mano, desde siempre, aunque más que «saberlo» lo han «padecido», tal y como se muestra en la película que da nombre a esta entrada.

La verdad es que, tal y como nuestro hemisferio derecho nos muestra, todo y todos estamos interconectados, pero esto es tan cierto como que, sin los LÍMITES, conscientes o inconscientes, que nuestro hemisferio izquierdo (o masculino) fija y mantiene, nos volveríamos locos al perder el contacto con la propia realidad. Esto lo saben muy bien muchas de las personas que, a lo largo de la historia, han experimentado con drogas buscando una iluminación «rápida» y, por otro lado, todas aquellas que han enfermado y muerto, sin haber encontrado dicha iluminación.

De hecho, la enfermedad es una especie de «locura» que pone de manifiesto nuestra pérdida de contacto con la propia realidad, debida a la falta de unos límites apropiados que den consistencia a nuestro yo.

Y, por tanto, el proceso de recuperar la salud es el proceso de recuperar nuestra esencia personal. 

La escena tras el entierro, cuando Sally Field grita con el corazón desgarrado de dolor ¿Por qué? ¿Por qué? ¿Qué sentido tiene la muerte de mi hija? No deja de conmoverme cada vez que la veo, porque yo podría darle una respuesta, aunque quizá no la querría aceptar por lo distante de nuestras creencias.

Las "pelis de chicas" suelen reflejar, con meridiana claridad, los problemas que acarrea la falta de límites debido al uso indiscriminado del hemisferio derecho, que provoca el ser y sentirse UNA con todas las demás, sin tener en cuenta que cuando una «chica» se hace mayor y se empareja, se establecen unos límites que la separan del grupo familiar y emocional al que haya pertenecido hasta ese momento.

Seguir compartiendo momentos de intimidad o tiempo libre con «el grupo» tal y como hacía cuando era soltera y niña, siempre irá en detrimento de su recién formada familia.

Es una creencia extendida que el tener «amigas para siempre» es algo positivo, así como formar parte de un grupo de apoyo femenino de varias amigas o conocidas que compartan todos sus problemas, incluso los más íntimos o de pareja. Cuando una mujer adulta, casada y con hijos, tiene varias amigas con las que comparte «su vida», reservando momentos de calidad para alimentar estas relaciones, nos está diciendo que sin ellas no es una persona completa

¡Nada que objetar! Si entendemos el amor como una especie de comuna donde todo se comparte, incluida la pareja y los hijos; ya que esto es lo que sucede en el nivel energético-emocional cuando se mantienen vivas este tipo de amistades en el tiempo.

Lo que no se conoce es el coste que esta vida compartida implica pues cualquier déficit emocional, cualquier problema o tensión que «cualquiera» de las amigas padezca, será soportado por el grupo. Y no estoy diciendo nada que no se sepa, así es como se «vende» este «concepto de amistades en el tiempo», es como jugar a la lotería, todos ponen y cada vez gana alguien del grupo…

La cuestión más negativa radica en que, en estos grupos de amigas, los roles de inicio se mantienen inamovibles en el tiempo y se convierten en los «pilares» que mantienen el edifico de la comunidad amistosa y social. Esto implica que la evolución personal queda suspendida en el tiempo y sólo es posible avanzar en grupo y dentro del espacio que te corresponde por «defecto»…

Así la simpática será cada vez más simpática, la lista cada vez más lista, la sexy cada vez más sexy, la gordita cada vez más gordita, la cotilla cada vez más cotilla, y si alguna de las «chicas» quiere cambiar de papel en la obra, o sea ¡solucionar su problema!, en vez de desahogarse cada cierto tiempo compartiendo con sus amigas, no podrá hacerlo, pues todos los carriles establecidos para el cambio ya están cubiertos.

Así es como nacen las «otras» pelis, las de las chicas malas, envidiosas y «brujas» que quieren quitarles el «puesto» o el novio a las «buenas chicas»… 


Esta inmovilidad en el tiempo, es la que provoca las desgracias que acontecen a las «buenas personas» y sus consiguientes quejas a dios, incluida su falta de fe ¡como si fuera él quien tomara las decisiones!


Las desgracias ocurren para preservar el equilibrio entre TODOS los seres humanos… pero, sobre todo, para preservar el equilibrio del GRUPO EMOCIONAL al que perteneces.

Si alguien de tu grupo familiar emocional está muy lleno de sí mismo (muy en su hemisferio izquierdo) alguien de este grupo, tendrá que vaciarse… es así de sencillo; aunque la falta de observación y fe en la vida hace que, para la mayoría de las personas, esto sea difícil de ACEPTAR y, por tanto, de VER.

Las pelis de chicas suelen ser sentimentales y de lágrima fácil ya que potencian el rol biológico que la naturaleza otorga al cuerpo femenino al inundarlo de hormonas destinadas a la crianza, mes a mes. Este proceso biológico dio paso, hace miles de años, a una cultura que lo retroalimentó más allá de lo saludable y por eso en los últimos 100 años, más o menos, el movimiento feminista se puso en marcha con el fin de contrarrestar la imposición cultural de un rol (el femenino) que ha de nacer desde dentro, desde el sentimiento y no ser algo impuesto por una ley.

¡Ni la teniente O’neill, ni Magnolias de acero o similares…!Antes que hombres y mujeres somos personas y hoy día es posible recibir una educación que nos permite utilizar los dos hemisferios sin sacrificar nuestra identidad biológica…










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